Salmo 37; 3 y 4.
3 Confía en Jehová, y haz el bien;
Y habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad.
4 Deléitate asimismo en Jehová,
Y él te concederá las peticiones de tu corazón.
<< El amor en Jesús y tenerle fe: son ingredientes infalibles para la receta de la felicidad, viértelos en tus pensamientos; con un toque de constancia, y serás perfecto >>Chermi Torres.
Cada persona desarrolla un método para alcanzar sus metas. El mío, en cambio fue conocer a Jesús, para agradar al padre. Y con su Espíritu Santo empezar la transformación para ser renovada para su gloria.
Para confiar debes conocer, eso es esencial en cualquier relación e incluso en los negocios. una vez escuche: “si deseas ser exitoso y estar feliz, sométete a Dios y se su amiga, obedécelo con honestidad y veras que nada será igual”
¿por qué no, debo probarlo? Me sentí retada. He leído tantos libros de cómo ser exitosa y todo trabajaba a mi ego y me infundía un amor a las riquezas, que si Diógenes el cínico, me viera me habría golpeado con su lámpara. Me presionaba por ser perfecta, me subestimaba, y a la vez dudaba de mí; es contraproducente, pero tenía miedo al fracaso, maltrataba mi salud física y mental. Me comparada con los demás y eso fue haciendo un hueco en mi autoestima y para contrarrestar me coloque una máscara la cual me hundió más.
Un día escuché de Jesús tuve curiosidad y quise acercarme, no sabía nada, pero sentía que era lo correcto. Empecé a leer una vida con propósito, la biblia y a meditar en su palabra, poco a poco fui a aprendiendo a adorarle, a perdonarme y a perdonar a los demás. A conocerme quien soy en Jesucristo descubrí la verdad y fui libre, su amor me liberto y me brindo paz la más exquisita, me enseno amar y amarme.
Le dije que deseaba vivir cómodamente en este mundo efímero y de prueba, en este mundo construido por engaños, y él me dijo: “confía en mí que yo lo hare, pero enfócate en mi reino y yo añadiré eso y mucho más, eres mi hija y me importan tus sueños y metas, te pondré como una princesa, te amo tanto, yo te daré el éxito que deseas porque de mi emana la prosperidad, cuida tu corazón, ámame y haz mi voluntad”
Mi verdadero éxito es Jehová Yahveh el creador del cielo y de la tierra, a través de Jesús entendí su gran amor, mi secreto es: obedecerlo, esperar en él, confiar y adorarle en espíritu y en verdad.